Recuperemos un espacio que es de todxs: la calle.

En la plaza de la Memoria, y en la plaza del Laurel, actividades de todas para todas. Parque para niños y niñas, jardín, actuaciones, comedores populares, talleres, juegos infantiles, cine de verano…

Comunicado:

Una vez más nos juntamos colectivos, asociaciones e individualidades para dar un paso hacia adelante en la lucha por recuperar nuestras vidas. Vemos como el capitalismo ha lanzado un brutal ataque contra la población al que llaman crisis, y con esta escusa vemos como nos recortan en salud, en educación, en derechos sociales, como se aprueban leyes para aumentar el control social, para llenar más las cárceles, para seguir exprimiéndonos hasta el último céntimo sin que ni si quiera podamos cantearnos. Las consecuencias son familias desahuciadas por no poder hacer frente a alquileres e hipotecas impuestas durante el falso estado de bienestar, vemos más de cinco millones de personas paradas, cárceles a rebosar de gente pobre, policías golpeando como mercenarios que son allí donde apunta el dedo de su amo.

Como decíamos damos un paso más en nuestra lucha, okupamos la plaza del laurel, un solar asfaltado y descuidado a propósito para ocultar una historia que no les interesa recordar. Nosotros y nosotras lo okupamos para visibilizar esta historia, para recordar el valor de este sitio y para gestionar este barrio como se merece, de una manera autónoma, horizontal y solidaria. Esperamos que este sea el impulso que nos hacía falta para unir fuerzas y construir nuestro futuro nosotros y nosotras mismas.

Recordaros que el próximo día 18 es el juicio contra las 11 personas encausadas por resistir en el tejado al desalojo del C.S.O. Kike Mur y hay una concentración de apoyo convocada a las 9:30 en la Plaza del Pilar. Tenemos que dejar claro que si nos tocan a uno, nos tocan a todos, y que en este barrio, al igual que en otros, nos estamos haciendo fuertes.

Seguiremos en la Plaza del Laurel luchando por la autogestión y construyendo un mundo nuevo.

QUE VIVA TORRERO Y LA LUCHA EN LOS BARRIOS